Este coche de lujo introduce un nuevo sistema estructural que combina una zona central ineformable (cockpit) con un peso de 128 Kgr y que contiene otras 8 zonas deformables calculadas para la absorción de la energía del impacto. De hecho, los resultados extraídos del Crash Test (según la normativa FIA) confirman que el cálculo estructural garantiza la integridad de sus ocupantes, desplazando los componentes laterales hacia el exterior. Esto demuestra la alta resistencia al impacto de la fibra de carbono aplicada al vehículo.
Por otro lado, el monocasco, desarrollado especialmente para el Tramontana, aporta ligereza y máxima rigidez al conjunto, factor que se complementa con un sistema de suspensión, único en su mercado, de doble trapecio con push-rod y una gran longitud de brazos, mejorando las aptitudes dinámicas del vehículo. Todo ello, elaborado con materiales de última generación de tecnología aeroespacial, como son; el acero, el cromolibdeno, el magnesio y el duraluminio.
Sin duda, en el Tramontana se ha puesto a prueba la eficiencia de la geometría y el peso, consiguiendo como resultado un comportamiento inigualable. La estructura del monocasco realizada en fibra de carbono otorga una elevada resistencia a la torsión, hecho que transmite al conductor la sensación de ir sobre raíles. Además, en el proceso de montaje se han adptado técnicas artesanales como la fijación por preimpregnado y curado en autoclave a 120ºC, que proporciona un nivel de acabado excepcional y facilita la construcción de piezas más robustas y ligeras.
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