

Este último, además de ser una cuestión de responsabilidad civil, es una manera de hacer frente a los pagos, y no tener seguro, constituye un delito.
Lo primero que hay que tener en cuenta, es saber qué tipo de seguro quieres contratar, ya que existen varias modalidades:
- Seguro a terceros. Es la más barata y cubre daños materiales y personales a terceros.
- Seguro a todo riesgo. Cubre los daños materiales y personales de terceros y los daños propios.
- Seguro a todo riesgo con franquicia. Cubre los mismos daños que el seguro a todo riesgo, pero el asegurado deberá de pagar parte por los daños causados.
Cuando el coche pasa de ocho años, debes de poner cuidado a la hora de contratar un seguro, porque si la reparación supera el valor del coche, la aseguradora no se hará cargo, por lo que merecerá la pena contratar un seguro a terceros, ante que uno a todo riesgo.
El sexo, la edad y la antigüedad, son factores que influirán a la hora de contratar el seguro del coche, ya que si eres mujer es más barato que si eres hombre y si eres mayor de 24 años, también pagas menos que los que se encuentran con un rango de edad entre 18-24 años. Cuanta más antigüedad tenga tu carnet, menos te costará tu seguro.
Los documentos más habituales que se necesitan para asegurar el vehículo son: DNI, factura de compra del vehículo, permiso de conducir, permiso de circulación, el cual debe de estar convalidado si has sacado tu permiso de conducir fuera de España.
Además deberás de presentar tu certificado de ITV al día y si vienes de otra aseguradora, deberás de presentar el recibo del seguro anterior, las condiciones particulares del mismo y el certificado de siniestralidad que te facilita la compañía de seguros anterior.