

Las inversiones proyectadas por los profesionales comandados por Mulally se concentrarán especialmente en la planta valenciana de Almussafes. En este lugar clave de la industria del motor española, se prepara la próxima comercialización de los modelos Transit Connect y Kuga.
El presidente de Ford ha afirmado que la compañía continúa firmemente comprometida en el proyecto de dotar de 1.200 millones de € en vista a la fabricación de los modelos C-Max y Gran C-Max… con venideras promesas híbridas.
Mulally no ha dejado pasar oportunidad de referirse a la crisis recordando que la innovación en todos los sectores, y especialmente el que él representa, debe ser considerado algo más que una bonita intención. La crisis no puede derrotar la ilusión por crear y por dar nuevas oportunidades a la sociedad, también desde el mundo del automóvil.
El presidente de Ford afirma que el gobierno detenta una responsabilidad ineludible, como es la de permitir los factores idóneos para la creación y el reflote de empresas. Según él, el valor de los activos no es reflejo del valor real, al mismo tiempo que afirma que el desarrollo, muy particularmente el del sector del automóvil, debe hacerse de manera sostenible.
Desde Ford también se insiste en que se producen más coches de los que realmente se demandan. Esta situación puede conducir a callejones sin salida para las compañías. El tema de cierre de fábricas, sugerido por otro de los directivos de Ford, Sergio Marchionne, no ha sido mencionado por el presidente general que, según lo que se deriva de sus declaraciones, prevé soluciones menos drásticas.