Si los BMW Serie 3 son los más exitosos comercialmente de la casa, los de la 5 no le van a la zaga en otros aspectos también fundamentales.
La forma exterior del BMW Serie 5 Gran Turismo, con el extenso capó, la línea superior tipo cupé, el amplio espacio entre ejes, habla ya desde el principio de las condiciones esenciales del coche. Deportividad y versatilidad en un automóvil de excelentes acabados y detalles de primera, como también se observan en su soberbio interior.
La comodidad de los pasajeros es otra de las preocupaciones de los ingenieros de BMW, que con el Serie 5 Gran Turismo ofrecen un vehículo en el que pueden moverse los asientos hacia atrás hasta 10 cm, y reclinarse para dormir, o para contemplar el cielo mientras se viaja, a través de su opcional techo panorámico. La movilidad de los asientos se realiza desde el habitáculo interior o bien desde el portaequipajes, con la consiguiente funcionalidad en cuanto al acomodo de equipaje en su interior.
BMW nos brinda el Serie 5 Gran Turismo en versiones de gasolina y diesel. En la primera, destaca el motor en V de 8 cilindros, equipado con tecnología BMW TwinPower Turbo, High Precision Injection y Doble-VANOS. 408 CV son capaces de acelerar este gran coche de 0 a 100 km/h en 5 segundos y medio, algo que raya las cualidades deportivas.
La versión diesel también goza de una llamativa aceleración de 0 a 100 km/h. Solamente 6,1 segundos le bastan al BMW 535d para llegar a esa velocidad. Su consumo, optimizado gracias a un motor que ha sido premio ‘Motor del Año’ en varias ocasiones, es de 8,9 l/100, unos guarismos nada elevados para un coche de su categoría.
Fuente imágenes: El mundo